sábado, 27 de noviembre de 2010

El Sarampion


El sarampión es una infección respiratoria sumamente contagiosa que está provocada por un virus. Cursa con una erupción cutánea que afecta a todo el cuerpo y con síntomas de tipo gripal, como fiebre, tos y secreción nasal. Aunque muy poco frecuente en Estados Unidos, 20 millones de casos ocurran en todo el mundo todos los años.Puesto que el sarampión está provocado por un virus, no hay tratamiento específico y el virus debe seguir su curso. Pero, si su hijo contrae el sarampión, es importante que usted se asegure de que guarda reposo e ingiere abundante líquido, aparte de impedir que contagie la infección a otras personas. Si hay algo que le preocupa sobre el estado de salud su hijo, llame al pediatra.

Signos y síntomas

Aunque el sarampión es más conocido por la erupción que provoca, los primeros síntomas de la infección suelen ser: tos seca, secreción nasal, fiebre alta y ojos rojos. Un signo característico del sarampión son las llamadas manchas de Koplik, unas pequeñas manchas de color rojo con la parte central de color blanco o azulado que aparecen en el interior de la boca.La erupción del sarampión tiene típicamente un aspecto parcheado y es de color rojo o rojizo; suele aparecer primero en la frente, extendiéndose posteriormente hacia abajo por toda la cara, el cuello y luego el resto del cuerpo hasta los brazos y los pies.El sarampión es sumamente contagioso. Noventa por ciento de personas que no han sido vacunadas para el sarampión lo conseguirá si ellos viven en la misma casa como una persona infectada. El sarampión es esparcido cuando alguien entra contacto directo con gotitas infectadas o cuando alguien con sarampión estornuda o tose y esparce gotitas de virus por el aire. Una persona con el sarampión es contagiosa para 1 a 2 días antes las síntomas comienzan hasta que acerca de 4 días después de que la erupción parece.El sarampión es muy poco frecuente en EE.UU. Debido a las vacunaciones sistemáticas, la cantidad de casos de sarampión ha disminuido en los últimos 50 años. Antes vacunación de sarampión llegó a ser disponible en los 1960s, había más de 500.000 casos en Estados Unidos todos los años. De 2000 a 2007, justo un promedio de 63 casos por año fue informado. Sin embargo, en 2008 había un aumento en casos de sarampión y brotes (más de 3 o casos más ligados) en Estados Unidos con 131 casos de sarampión informado entre enero y julio. Más de 90% de esos infectado no fue inmunizado, ni estatus de inmunización fue desconocido.Lo más importante que puede hacer para proteger a su hijo del sarampión es vacunarlo siguiendo el calendario de vacunaciones sistemáticas recomendado por el pediatra del niño.

Prevención

Generalmente los lactantes están protegidos del sarampión durante los primeros seis meses de vida debido a la inmunidad que les transmiten sus madres. Los niños mayores se suelen vacunar contra el sarampión siguiendo las regulaciones estatales y escolares.La mayoría de los niños reciben la vacuna del sarampión como parte de la vacuna triple vírica, que protege contra el sarampión, las paperas y la rubéola, o la vacuna MMRV (que protege contra el sarampión, las paperas, la rubéola, la varicela y que se administra entre los 12 y los 15 meses de edad y de nuevo entre los cuatro y los seis años. La vacuna del sarampión no se suele administrar a lactantes de menos de 12 meses. Pero, si se declara una epidemia de sarampión, se puede administra la vacuna a niños de solo 6 a 11 meses, seguida de la habitual vacuna triple vírica en 12 a 15 meses y 4 a 6 años.Como ocurre con todos los programas de vacunación, hay excepciones importantes y circunstancias especiales. El pediatra de su hijo debería estar al corriente de la información actualizada sobre la vacuna del sarampión. Esta vacuna no debería administrase a mujeres embarazadas, a niños con tuberculosis activa sin tratamiento, leucemia u otras cánceres, ni a personas cuyo sistema inmune está deprimido por cualquier razón.Asimismo, la vacuna del sarampión no se debería administrar a aquellos niños que tengan antecedentes de graves reacciones alérgicas a la gelatina o al antibiótico neomicina, ya que existe el riesgo de que presenten reacciones graves a la vacuna.Durante un brote de sarampión, las personas que no han sido vacunadas (especialmente ésos en riesgo de la infección grave como mujeres embarazadas, de los niños, ni de los niños con sistemas inmunológicos debilitados) pueden protegerse de la infección provocada por el virus del sarampión mediante una inyección de anticuerpos denominados immunoglobulinas, que debe administrase durante los seis días inmediatamente posteriores a la exposición al virus. Estos anticuerpos pueden impedir que el niño contraiga el sarampión o bien mitigar sus síntomas. La vacuna del sarampión quizás dé alguna protección si es dado dentro de 72 horas de exposición de sarampión.En algunas ocasiones la vacuna del sarampión provoca efectos secundarios en niños que no tenían previamente problemas de salud. Las reacciones más comunes incluyen fiebre entre 6 y 12 días después de vacunación en acerca de 5% a 15% de niños que consigue la vacuna, y acerca de 5% desarrolla una erupción de sarampión-como, que no es contagiosa y destiñe por sí mismo.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

la varicela

La varicela es una enfermedad contagiosa causada por el virus varicela-zóster, un virus de la familia de los herpesvirus que también es el causante del herpes zóster. Es una de las enfermedades clásicas de la infancia, que en los niños suele ser leve pero en adolescentes y adultos tiene mayor riesgo de complicaciones. La enfermedad dura alrededor de una semana.

La varicela es una infección viral causada por un herpesvirus del género Varicellavirus y la subfamilia Alphaherpesvirinae. La taxonomía lo ha denominado virus herpes humano 3 (HHV-3) cuyo único reservorio conocido es el hombre. El virus tiene un ADN de doble cadena (dsADN). Todos los virus de esta familia rodean su ADN con una cápside icosaédrica con un área proteica triangular que lo recubre. En la población adulta en Europa Central alrededor del 93 al 96% de la población tiene anticuerpos sanguíneos detectables para la varicelaEl signo más característico de la varicela es una erupción en la piel que aparece en forma de pequeños granos que en poco tiempo se convierten en vesículas (ampollas llenas de líquido). Las vesículas suelen aparecer primero por la cara, el tronco y el cuero cabelludo, extendiéndose después por todo el cuerpo. También puede afectar a la boca, a la vulva y al interior de los canales auditivos. Uno o dos días después las vesículas se transforman en costras. Durante los primeros días aparecen varias oleadas de vesículas, por lo que pueden verse a la vez lesiones en varias fases evolutivas (lo que se conoce como patrón "en cielo estrellado").
Cáncer de piel

viernes, 19 de noviembre de 2010

El Tabaco



  La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) es una de las principales causas de morbilidad y una de las enfermedades crónicas con mayor impacto sanitario, económico y social; de hecho, 210 millones de personas la sufren en el mundo, con 3 millones de muertes anuales. Se calcula que en España la EPOC es la quinta causa de muerte, con una tasa global de 33 casos por 100.000 habitantes, que se eleva a 176 por 100.000 habitantes cuando éstos son mayores de 75 años.
   Asociada al consumo de tabaco, los últimos estudios confirman que entre un 12 y un 15 por ciento de los fumadores desarrollará EPOC si no abandona el hábito. En este sentido, el tabaquismo sigue siendo el principal factor de riesgo de esta enfermedad, ya que el 90 por ciento de los pacientes con EPOC son fumadores actuales o han fumado durante una buena parte de su vida.
   De cara al futuro, y aunque se consiga reducir las tasas actuales de tabaquismo, se estima que la mortalidad por EPOC duplicará las cifras actuales en los próximos 20 años, convirtiéndose en la tercer causa de muerte en el mundo occidental.
   Para intentar revertir esta tendencia y reducir en la medida de lo posible los costes humano, familiar, social y económicos derivados de la atención sanitaria a los pacientes que sufren esta enfermedad, teniendo en cuenta que las enfermedades respiratorias crónicas constituyen el tercer motivo de consulta en Atención Primaria, representando la EPOC el 8 por ciento de los ingresos hospitalarios, la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias ha participado en la elaboración de la Estrategia en EPOC del Sistema Nacional de Salud, aprobada por el Consejo Interterritorial a mediados del presente año.
   Esta Estrategia ha sido diseñada para intentar corregir las principales carencias en el tratamiento de esta enfermedad, como son el infradiagnóstico y el inicio tardío del tratamiento, ya que los primeros síntomas aparecen cuando la enfermedad ya está en una fase avanzada, y es esta circunstancia la que determina que el 73 por ciento de las personas con EPOC aún no lo sepa.
   En este sentido, la Consejería de Sanidad está incorporando medidas para incrementar la tasa de diagnóstico precoz de EPOC, como la realización de la prueba de espirometría en los centros de salud de Canarias, donde los problemas respiratorios se presentan como el motivo de visita más frecuente. Así pues, es el médico de familia, en coordinación con los equipos de Neumología de los hospitales, quien mejor puede detectar si un paciente presenta EPOC.
   En estas unidades, los pacientes no sólo reciben atención médica sino que además cuentan con información y formación sobre su enfermedad y sobre el modo de llevar a cabo el tratamiento de su enfermedad de manera adecuada en su domicilio al objeto de disminuir la necesidad de ingreso hospitalario.
   En los últimos años se ha venido desarrollado la técnica de ventilación no invasiva con personal sanitario entrenado en el manejo de estos pacientes en situaciones críticas, lo que ha permitido aumentar la esperanza de vida de estos enfermos. Para los pacientes más graves existe la prestación de oxigenoterapia y ventilación.
   Dada la estrecha relación de la EPOC con el tabaquismo y coincidiendo con las celebraciones de la XI Semana Sin Humo y el Día Mundial Sin Tabaco 2010, Sanidad animó a las Sociedades Científicas Canarias a adherirse al Manifiesto para una vida en Canarias libre de humo de tabaco, en la que se pretendía aglutinar a todos los estamentos sociales, empresas, entidades públicas y privadas y distintas asociaciones a participar conjuntamente en la lucha contra la epidemia de tabaquismo en Canarias.
   A través de esta iniciativa entidades adscritas han ido recibiendo gratuitamente unos expositores con materiales de divulgación, adquiriendo, como contrapartida, el compromiso del respeto a la legislación vigente en materia de tabaquismo y participar, siempre en la medida de sus posibilidades en cada momento, en las diversas acciones que surjan desde las la Consejería de Sanidad con respecto al tabaquismo.
   La campaña incluyó expositores para el manifiesto, carteles en cabinas telefónicas, vallas, y campaña on line, con la creación del  dominio canariaslibredehumodetabaco.org, que redirigirá a la iniciativa en una nueva sección ubicada en la web institucional del Gobierno regional, con información del Manifiesto y un formulario para que empresas e interesados  puedan solicitar información y adherirse al mismo.
   Por otro lado, la Consejería de Sanidad ha suscrito el documento de Consenso EPOC de Canarias, que conforma una estrategia multidisciplinar para el manejo de la enfermedad en el Archipiélago. Este documento ha sido elaborado por un nutrido grupo de profesionales,  que está abierto a todas las sociedades científicas, entidades y profesionales interesados en la EPOC y donde se siguen las líneas maestras de la Estrategia del Sistema Nacional de Salud, que define una actuación coordinada e integral orientada al paciente con el objetivo de garantizar la accesibilidad y equidad y una atención científico-técnica de calidad con criterios de coste-efectividad.
   El documento de Consenso se caracteriza por su contenido vivo, dinámico y está sujeto a revisión, actualización y mejora continua, con los objetivos de contribuir a un mejor conocimiento de esta enfermedad entre los profesionales sanitarios, los pacientes y los ciudadanos de Canarias y asesorar a las autoridades sanitarias para mejorar la calidad de vida y la supervivencia de los pacientes.

paco (pasta base)




















Paco (llamada también Pasta Básica de Cocaína, Pasta Base o PBC) es una droga de bajo costo elaborada a partir de bicarbonato de sodio, cafeína, alcaloide de cocaína y anfetaminas.
Se suele consumir por vía respiratoria en pipas (generalmente caseras) o sobre la marihuana en forma de cigarrillo (marciano, maduro, bazoco, Free o ensacado) y, debido a su composición química, es altamente tóxica y adictiva. Consiste en una sustancia psicoactiva compuesta principalmente por las extracción de alcaloides de la hoja de coca que no llegan a ser procesados hasta convertirse en el clorhidrato de cocaína, que es la forma más común y buscada de presentación de esa sustancia. La extracción de los mismos se realiza mediante la maceración de la hoja de coca en queroseno u otros solventes, pero por la escasez de precursores químicos para convertir este grupo de alcaloides en la sal de cocaína por reacción con el ácido clorhídrico, se vende de esta forma en buena parte de Sudamérica.
El basuco no es soluble en agua, ni se puede esnifar o inyectar, por lo que sólo puede consumirse fumando, en forma de cigarrillo o pipa. Es altamente adictiva y es muy común entre los sectores más pobres de las diferentes países por su bajo coste y fácil adquisición en las calles.
Sus efectos son de tipo estimulante produciendo una intensa sensación de placer y estimulación del sistema nervioso central (SNC), que sucede en pocos minutos y deja al usuario con el deseo de repetir la toma una y otra vez. El basuco tiene los mismos riesgos que el consumo inmoderado de cocaína, pero además por su vía de administración afecta también a los pulmones y fácilmente ocasiona problemas cardio-vasculares y cerebro-vasculares. También puede afectar las encias.
Considerado formalmente como desecho químico, la sustancia se ha vuelto popular en las villas, miserias de Argentina luego del colapso financiero sufrido en el año 2001. Con el fin de la convertibilidad, los traficantes interrumpieron la distribución de marihuana y cocaína para incentivar el consumo de la droga conocida como "basuco". En ese país, el paco ha adquirido el nombre de ladrón de cerebros por su dañino efecto en el sistema nervioso, mientras que los adictos a esta droga son corrientemente denominados como muertos vivos debido a su apariencia física.
En Chile y en Argentina, así como en Uruguay se le conoce por el nombre de "Pasta Base", "Pasta", "Lata", "Churri", "Tumba", entre otros. Dicha droga ha desplazado a otras más comunes tales como el porro y la cocaína por tener un precio muy bajo: la pasta base cuesta alrededor de $7,0 pesos argentinos (50 pesos uruguayos o 1000 pesos chileno, aproximadamente 2 dólares) y existen dosis menores que cuestan entre $25 y $30 uruguayos o 1 peso argentino y que se conocen como "chasquis", "petardo","pitillo" (por unos pequeños petardos de similar apariencia). Un gran crecimiento en su consumo se observó alrededor del año 2002.
Por otro lado, en estos países es cada vez más común el consumo de "freeway", es decir marihuana mezclada con pasta base y consumida como cigarrillo en lugar de pipa, ya que el efecto de la droga no es tan fuerte convirtiéndola así en una sustancia de punto medio entre el porro y la pasta base, en cuanto al efecto producido.
El consumo de paco se realiza a través de pipas caseras (latas agujereadas, antenas de televisión, etc.), donde se mezcla el producto con viruta de metal y ceniza de cigarrillo de tabaco o virulana metálica a modo de filtro.


Etapas que atraviesa el consumidor







Las etapas por las que transita un consumidor al momento de consumir paco son cuatro:
Euforia: disminución de las inhibiciones.
Disforia: comienzo de sentimiento de angustia, depresión e inseguridad.
Adicción: consumo sin interrupciones, buscando mitigar la sensación de disforia.
Etapa de psicosis y alucinaciones: surge la pérdida de contacto con la realidad, agitación, paranoias, agresividad y alucinaciones que pueden durar semanas.
La euforia que siente el usuario al ingerir una dosis dura de 1 a 5 minutos, dependiendo de la cantidad y la calidad de la droga. Considerando lo anterior y la adicción a la misma, cuando un consumidor empieza fumando una dosis generalmente sigue hasta que se le agotan sus recursos, volviendo repetidamente a la "boca de venta" a buscar más, cegado por las ansias de volver a fumar. Sus efectos son de tipo estimulante produciendo una intensa sensación de placer y estimulación del sistema nervioso central (SNC), que sucede en pocos minutos y deja al usuario con el deseo de repetir la toma una y otra vez. El basuco tiene los mismos riesgos que el consumo inmoderado de cocaína, pero además por su vía de administración afecta también a los pulmones y fácilmente ocasiona problemas cardio-vasculares y cerebro-vasculares. También puede afectar las encias.
Durante la euforia, la persona parece atontada, se queda sin habla y se le abren los ojos más de lo normal. Luego de esta euforia pasajera todo lo demás es disforia y adicción o como se dice popularmente "fisura" o estar "doblado", "quebrado", la persona se vuelve seria y su único interés es seguir fumando a cualquier costo.

Consecuencias del consumo
Los consumidores frecuentes de paco, especialmente aquellos con escasos recursos económicos, suelen cometer delitos, prostituirse o vender sus pertenencias -hasta las más básicas- para obtener más de esta droga. La socióloga Alcira Daroqui, empleada en los juzgados de menores de Quilmes, cita a una joven adicta al paco luego de su internación: "Yo agradecí haberle dejado mi piba a mi papá aunque él era violento, porque si no, yo era capaz de haberla vendido".
Según el gobierno de la Provincia de Buenos Aires, el consumo intenso de paco puede producir muerte cerebral en al menos 6 meses. El adicto al paco puede fumar por día, en promedio, 10 a 15 cigarrillos. El efecto de un cigarrillo de paco dura de dos a cinco minutos. Suponiendo que la droga se logró al menor precio actual (2 pesos, aproximadamente 0,62 dólares) entonces, al mes tendrá que gastar entre $600 y $900 pesos en lugar de $300 a $450 como ocurría en el inicio de la comercialización, cuando costaba 1 peso (aproximadamente 0,32 dólares).Sin embargo, el consumo comenzó a diseminarse entre los adolescentes de clase media, quienes pagan entre $2 a $5 por un producto más sofisticado. Si bien el paco es una droga de bajo costo, la adicción que produce y su efecto breve obliga al consumo reiterado por parte del usuario, quien puede fumar una decena o más de cigarrillos de paco por día.
Se estima que en Argentina se consumen 400.000 dosis de paco por día. El Estudio Nacional sobre Consumo de Sustancias Psicoactivas del SEDRONAR indicó que el consumo de pasta base de cocaína creció en los últimos años un 200%. La organización Madres en Lucha, que reúne unas 150 mujeres con hijos afectados por el consumo de pasta base, advirtió que en la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano mueren "dos jóvenes por semana" debido a causas relacionadas al paco.



Efectos secundarios
Expectoración de sangre o mucosa sanguinolenta del tracto respiratorio.
Su consumo durante el embarazo produce mutaciones severas en el feto.
Degradación progresiva de la piel.
Debilitamiento de los músculos.
Reducción acelerada del peso corporal (en algunos casos produce anorexia).
Desgano e insomnio.
Midriasis.
Náuseas y vómitos.
Hipertensión arterial.
Migraña severa.
Taquicardia.
Frecuentemente produce ulceraciones en los labios y la cavidad bucal.
Comportamiento errático y violento.
Convulsiones véase http://www.eltrecetv.com.ar/policias-en-accion-2008/video/paco-problema-de-base


fuentes: http://es.wikipedia.org/wiki/Paco_(droga) publicado por Diego Diaz

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Anemia


 cuando un nivel bajo de hierro es la causa


¿Qué es la anemia?

La anemia ocurre cuando su sangre no tiene suficiente hemoglobina. La hemoglobina es una proteína dentro de sus glóbulos rojos que transporta oxígeno desde sus pulmones hacia el resto del cuerpo. Una causa común de anemia es no tener una cantidad de hierro suficiente. Su cuerpo necesita hierro para fabricar hemoglobina.


Síntomas de anemia

  • Frecuentemente no hay síntomas.
  • Palidez
  • Sensación de cansancio
  • Sensación inusual de "falta de aire" al hacer ejercicio.
  • Latidos del corazón acelerados


¿Qué puede causar niveles de hierro bajos?

Una serie de cosas pueden hacer que sus niveles de hierro estén bajos:

Falta de hierro en la dieta. Este problema ocurre principalmente en los niños y en las mujeres jóvenes. Los niños que toman mucha leche y no comen alimentos ricos en hierro, y las mujeres jóvenes que siguen dietas que "están de moda" corren el riesgo de tener deficiencia de hierro.

Fases de crecimiento acelerado. Los niños menores de tres años crecen tan rápido que sus cuerpos tienen dificultad para mantener el nivel apropiado de hierro que ellos necesitan.

Embarazo. Las mujeres que están embarazadas o que están lactando necesitan 2,5 veces más hierro que los hombres. Esa es la razón por la cual a las mujeres embarazadas se les hace una prueba para determinar si están anémicas y por la cual tienen que comer más alimentos ricos en hierro o tomar diariamente tabletas de hierro.

Pérdida de sangre. Esta es una causa común de anemia por deficiencia de hierro en los adultos. Las menstruaciones fuertes pueden causar anemia. La pérdida de sangre también puede ser causada por el sangrado interno, usualmente en las vías digestivas. Una úlcera duodenal, colitis ulcerativa, cáncer, o tomar aspirina o un medicamento similar durante largo tiempo puede causar sangrado en su estómago o intestinos. Esta es la razón por la cual es importante determinar la razón para un nivel de hierro bajo.


¿Cómo se diagnostica la anemia?

Hable con su médico si usted piensa que puede tener anemia. Probablemente le harán una prueba de sangre para diagnosticarle si tiene anemia. Se pueden requerir otras pruebas para determinar qué es lo que está causando la anemia.


¿La anemia puede prevenirse?

Algunos tipos, como aquellos ocasionados por deficiencias en la dieta, pueden prevenirse. Usted puede ayudar a prevenir este tipo de anemia asegurándose de comer comidas que sean ricas en hierro. Mire el cuadro de abajo para ver una lista de alimentos ricos en hierro.


Comidas con un alto contenido en hierro

  • Hígado y otras carnes
  • Mariscos
  • Frutas secas como albaricoques, ciruelas pasas y uvas pasas.
  • Nueces
  • Granos, especialmente las habas.
  • Vegetales verdes y con hojas tales como espinacas y brócoli.
  • Melaza
  • Granos enteros
  • Panes y cereales (fíjese en la etiqueta) fortificados con hierro.


¿Cómo se trata la anemia?

Depende de lo que causa la anemia. Por ejemplo, si la causa de la anemia es la pérdida de sangre en cantidades altas, la causa de la pérdida de sangre deberá ser tratada. Si la anemia es el resultado de una dieta con un contenido bajo de hierro, su médico puede recomendarle hacer cambios en la dieta o tomar tabletas de hierro.

¿Cómo puedo aumentar el hierro en mi dieta?

Su cuerpo absorbe mejor el hierro que está en las carnes. El comer una pequeña cantidad de carne junto con otras fuentes de hierro, tales como vegetales, le puede ayudar a obtener aún más hierro a partir de estas comidas. Tomar tabletas de vitamina C o comer alimentos ricos en vitamina C —tales como frutas cítricas o jugo de frutas— al tiempo que se comen alimentos ricos en hierro o tomarse una tableta de hierro le puede ayudar a su cuerpo a absorber mejor el hierro.

Algunos alimentos bloquean la absorción de hierro. Estos incluyen el café, té, clara de huevo, leche, fibra y la proteína de soya. Trate de evitarlos cuando esté comiendo alimentos ricos en hierro.


¿Las tabletas de hierro pueden ocasionar problemas?

Las tabletas de hierro pueden causar malestar estomacal, acidez estomacal y estreñimiento. Asegúrese de mencionarle a su médico acerca de cualquier malestar que usted note. Los consejos en el cuadro de abajo le pueden ayudar a disminuir el malestar.


Consejos para tomar tabletas de hierro

  • Tome las tabletas con comida.
  • Empiece despacio. Trate de tomarse 1 tableta cada día durante 3 a 5 días, luego 2 tabletas cada día hasta que ya no le moleste esa cantidad. Aumente el número de tabletas hasta llegar al número que su médico le recomendó.
  • Si tiene estreñimiento aumente la cantidad de fibra en su dieta. Esto vale la pena aun cuando la fibra pueda interferir con la calidad de absorción de hierro por parte de su organismo. De todas maneras usted podrá absorber algo de hierro y esto es mejor que no tomar nada de hierro si usted lo necesita.
  • No se tome las tabletas de hierro antes de acostarse si le causan malestar estomacal.
  • Si un tipo de tabletas de hierro le causa problemas hable con su médico acerca de probar con una fórmula o marca distinta.

viernes, 12 de noviembre de 2010

REINO HONGOS

Los hongos son organismos multicelulares, es decir que pueden ser unicelulares o pluricelulares, que se alimenta mediante la absorción, estos vegetales no pueden sintetizar su propios alimentos, viven sobre otros organismos es por ello que se dicen que son saprofitos o parásitos y forman líquenes. Los hongos son organismos sin clorofila, por lo que no pueden realizar la función de fotosíntesis, obtienen sus alimentos en forma directa o indirecta, almacenando sustancias sustancias nutritivas.
Los cuerpos de los hongos están formados por unos filamentos llamados hifas en la que podemos encontrar la materia orgánica donde crece llamada micelio nutritivo, estos son los llamados hongos parecidos a un paraguas, debido a que levantan en el aire o mecelio reproductivo. Son inmóviles pero con flujo protoplasmático en el micelio (Los micelios son masas de filamentos ramificados llamados hifas que constituyen el hongo). Su ciclo de reproducción es primordialmente sexual y asexual.

Sexual: Todos los hongos con excepción de los hongos imperfectos (Deuteromictos) poseen una reproducción sexual.

Asexual: esta reproducción ocurre solo en hongos inferiores acuáticos (ficomicetos)

Existen hongos perjudiciales, ya que atacan los alimentos, por otro lado también hay hongos de gran utilidad como lo son las levaduras, las cuales son usadas en la fabricación del pan, del vino y de la cerveza entre otros licores. También hay hongos comestibles (champignon). Igualmente, hay hongos utilizados en la medicina como el Penicillium y de otros hongos se extrae la penicilina y otros antibióticos, como también existen hongos que son extremadamente venenosos.

Los hongos pueden vivir en cualquier medio donde exista sustancias orgánicas, agua, aire y una adecuada temperatura. También pueden vivir como parásitos facultativos; es decir que el micelio destruye las células de las que se alimentarán más tarde. De forma parecida, pueden vivir como parásitos obligatorios cuando se alimentan de la materia viva o muerta del hospedador, viviendo en la superficie (extoparásito) o muy profundamente (endoparásitos). Por último, se les encuentra viviendo en simbiosis formando líquenes. Los hongos son de gran utilidad en la naturaleza, debido a que desintegran las sustancias orgánicas y de modo este modo preparan el medio para otros organismos como lo son las plantas autótrofas.

Los hongos se dividen en cuatro grandes clases:



Ascomicetos: son de gran utilidad en la industria y la medicina. A los ascomicetos están repartidos por diversos medios: en el agua, en el suelo, en vegetales y animales en descomposición, en sustancias azucaradas, en el que llevan una vida parasitaria causando serias enfermedades a plantas cultivadas. Este tipo de hongos también pueden ser saprofitos, los cuales tienen muchas aplicaciones de gran valor; son utilizados en la fabricación de queso, para ciertas fermentaciones y los del género Penicillium son los utilizados para producir antibióticos.

Ficomicetos: Son los hongos llamados moho del pan y de las frutas y en algunos casos es parásito del repollo.

Deuteromictos: Son cuando los hongos forman los líquenes, los cuales tienen una gran distribución en la superficie de la tierra, se pueden ver en las selvas, en la corteza de los árboles, en los desiertos y aun sobre las rocas y lugares nevados.

Basidiomicetos
: Son los populares hongos de sombrerito y oreja de palo (que son los aparecen en los en los trocos de los árboles). Los hongos de sombrerito son de un gran valor económico, ya que son comestibles, pero existen algunas especies que son altamente venenosos.

sábado, 6 de noviembre de 2010

Las Drogas




Drogas
Son aquellas sustancias cuyo consumo puede producir dependencia, estimulación o depresión del sistema nervioso central, o que dan como resultado un trastorno en la función del juicio, del comportamiento o del ánimo de la persona.
El término drogas visto desde un punto de vista estrictamente científico es principio activo, materia prima. En ese sentido droga puede compararse formalmente dentro de la farmacología y dentro de la medicina con un fármaco, es decir que droga y fármaco pueden utilizarse como sinónimos. Los fármacos son un producto químico empleado en el tratamiento o prevención de enfermedades. La farmacología es la ciencia que estudia la acción y distribución de los fármacos en el cuerpo humano. Los fármacos pueden elaborarse a partir de plantas, minerales, animales, o mediante síntesis.
Existe una segunda concepción que es de carácter social, según ésta las drogas son sustancias prohibidas, nocivas para la salud, de las cuales se abusan y que en alguna forma traen un perjuicio individual y social.
Como se ve, un elemento importante es la intencionalidad y el propósito de alterarse mentalmente en algunas de las formas, ya sea deprimiéndose, alucinándose o estimulándose. Luego nos queda el problema dónde actúan estas sustancias, ya que todas estas drogas tienen un elemento básico en el organismo que es el sistema nervioso central el cual es la estructura más delicada y el más importante que tiene el ser humano, y si estas sustancias actúan sobre esas estructuras dañándolas, perjudicándolas, indudablemente que van constituir un elemento grave y peligroso para la colectividad; para la salud individual y lógicamente para la salud pública.
Según su grado de dependencia
Drogas Duras
Las drogas "duras", son aquellas que provocan una dependencia física y psicosocial, es decir, que alteran el comportamiento psíquico y social del adicto, como el opio y sus derivados, el alcohol, las anfetaminas y los barbitúricos.
Drogas Blandas
Son las que crean únicamente una dependencia psicosocial, entre las que se encuentran los derivados del cáñamo, como el hachís o la marihuana, la cocaína, el ácido lisérgico, más conocido como LSD, así como también el tabaco.
Esta división en "blandas" y "duras" es cuestionada por muchos estudiosos del tema ya que consideran que se podría sugerir con ella que las "duras" son malas y, por consiguiente, las "blandas" son buenas o menos malas y no es así, ya que a partir de determinadas dosis y según la forma de ser administradas, las drogas "blandas" pueden tener efectos tan nocivos como las "duras".
Hay que tener presente que a partir de determinadas dosis las drogas denominadas "blandas" pueden tener efectos tan nocivos como las consideradas "duras".
La dependencia es el estado del individuo mediante el cual crea y mantiene constantemente un deseo de ingerir alguna substancia. Si éste deseo se mantiene por mecanismos metabólicos y su falta crea un síndrome de abstinencia, se denomina dependencia física. Si la dependencia se mantiene por mecanismos psicosociales, suele definirse como dependencia psíquica o psicosocial.
Desde un punto de vista farmacológico, las drogas se dividen en narcóticos, como el opio y sus derivados la morfina, la codeína y heroína; estimulantes, como el café, las anfetaminas, el crack y la cocaína, y alucinógenos, como el LSD, la mezcalina, el peyote, los hongos psilocibios y los derivados del cáñamo, como el hachís.
Narcóticos
La palabra narcótico es un vocablo griego que significa "cosa capaz de adormecer y sedar". A pesar de que esta palabra se usa con frecuencia para referirse a todo tipo de drogas psicoactivas, es decir, aquellas que actúan sobre el psiquismo del individuo, el campo de los narcóticos se pueden dividir en la actualidad en varios grupos, que son los siguientes:
  • Opio, opiáceos y sucedáneos sintéticos.
  • Neurolépticos o tranquilizantes mayores.
  • Ansiolíticos o tranquilizantes menores.
  • Somníferos o barbitúricos.
  • Grandes narcóticos o anestésicos generales.

Se trata de drogas con composiciones y orígenes distintos, que tienen en común su efecto en el organismo, aunque éste se manifieste en manera y en grado diferentes.
Pero el elemento fundamental que las une consiste en que todos los narcóticos causan adicción física. Es adictivo aquel fármaco que, administrado en dosis suficientes durante un período de tiempo relativamente largo, induce un cambio metabólico. Cuando deja de administrarse desencadena una serie de reacciones conocidas como "síndrome de abstinencia".
Neurolépticos o tranquilizantes mayores
Se trata de sustancias utilizadas para tratar la depresión, las manías y las psicosis, y muchas de ellas se venden sin prescripción médica en la mayoría de farmacias. Entre éstas se encuentran las fenotiazinas, el haloperidol y la reserpina.
Conocidos como neurolépticos (del griego neuro, "nervio", y lepto, atar, producen un estado de indiferencia emocional, sin alterar la percepción ni las funciones intelectuales.
Sumamente tóxicos, poseen efectos secundarios tales como parkinsonismo, destrucción de células de la sangre, arritmia cardíaca, anemia, obstrucción hepática, vértigos, retención urinaria, estreñimiento, irregularidad menstrual, atrofia testicular, congestión nasal, bruscos ataques de parálisis muscular, síndromes malignos como hipertermia y muerte inesperada.
Ansiolíticos o tranquilizantes meno
Habitualmente usados para tratar las neurosis, la etimología de su nombre, ansiolíticos, significa "liquidador de la ansiedad". En el mercado español se comercializan con distintos nombres.
Según estadísticas farmacológicas actuales, estas drogas constituyen la mitad de todos los psicofármacos consumidos en el mundo, a pesar de que producen un síndrome de abstinencia muy grave.
En dosis mayores funcionan como hipnóticos o inductores del sueño; también algunos se usan como relajantes musculares.
Producen letargia, estupor y coma, con relativa facilidad. En caso de adicción pueden inducir a la aparición de alteraciones hemáticas.
Al abandonar su consumo pueden aparecer episodios depresivos, desasosiego o insomnio, que suelen ser muy duraderos.
Somníferos o barbitúricos
Estas sustancias se popularizaron cuando en Estados Unidos aparecieron las primeras leyes que prohibían el alcohol, el opio y la morfina.
Su uso puede provocar lesiones en el hígado o en los riñones, producir erupciones cutáneas, dolores articulares, neuralgias, hipotensión, estreñimiento y tendencia al colapso circulatorio.
La intoxicación aguda puede llegar a provocar la muerte, que sobreviene por lesión del cerebro debida a la falta de oxígeno y a otras complicaciones derivadas de la depresión respiratoria.
La dependencia física se genera entre las cuatro y las seis semanas. Con frecuencia, el síndrome de abstinencia suscita cuadros de delirium tremens.
Grandes narcóticos
Existen varias sustancias usadas en anestesia general que merecen estar incluidas en este grupo por su capacidad de producir sopor o estupefacción, mayor que la de cualquier estupefaciente en sentido estricto. En dosis leves produce una primera fase de excitación cordial, como el alcohol, y luego sedación y sopor.
También generan tolerancia y, en consecuencia, adicción, pudiendo ocasionar intoxicaciones agudas, e incluso la muerte.
El fentanil, dentro del grupo de los grandes narcóticos, posee cuarenta veces más potencia que la heroína y es el más usado actualmente en las intervenciones quirúrgicas, debido a su bajo índice de toxicidad para el corazón y para el sistema nervioso
Opio y sus derivados
Con el nombre popular de adormidera o amapola se conoce el fruto del cual se obtiene el opio y sus derivados. Es un polvo de color tostado. Se extrae de los granos que contiene el fruto y entre sus usos medicinales se encuentran la supresión del dolor, el control de los espasmos y el uso como antitusígeno.
Además, existen referencias con una antigüedad cercana a los ocho siglos del uso medicinal del opio que hacían persas, egipcios, babilonios, árabes y griegos. Los asiáticos descubrieron sus posibilidades estimulantes y placenteras y comenzaron a utilizarlo con ese fin. Entre sus derivados se encuentran la morfina, la heroína, la metadona y la codeína. Todos ellos pueden brindar extraordinarios beneficios terapéuticos si son recetados y controlados por un médico, pero el uso descontrolado produce efectos devastadores.
El cultivo de la flor del opio se origina en el sudeste asiático (Birmania, Tailandia, Camboya y Laos). En los últimos años se ha extendido a otros países, como Colombia, para asegurar el suministro constante a los grandes centros de consumo.
Los opiáceos se presentan como polvo para fumar o solución inyectable. Este narcótico produce un estado de euforia y ensoñación; una sensación de éxtasis que se acorta rápidamente a causa de la tolerancia. Al poco tiempo de uso, los adictos experimentan síntomas de abstinencia entre una y otra toma, que se caracterizan por presentar un cuadro pseudo-gripal en el curso de las primeras 12 horas: estornudos, sudoración, lagrimeo, bostezos y dolores musculares. Luego de 36 horas de abstinencia los síntomas se intensifican. Aparecen escalofríos, sofocos, insomnio, diarrea, incremento del ritmo cardíaco y de la presión sanguínea. Si no se repite la toma, los síntomas declinan en los diez días subsiguientes. En cambio si se prolonga su uso, se inicia el camino de la dependencia sin atenuantes, cuyos efectos físicos son:
  • Epidermis enrojecida.
  • Pupilas contraídas.
  • Náuseas.
  • Decaimiento de la función respiratoria.
  • Pérdida de reflejos.
  • Falta de respuesta a los estímulos.
  • Hipotensión.
  • Desaceleración cardíaca.
  • Convulsiones.
  • Riesgo de muerte.
Los efectos psicológicos son similares a los de otros estimulantes:
  • Euforia.
  • Energía.
  • Placer.
  • Vigor sexual.
Pero en cuanto decae la acción de la droga, aparece la angustia, la depresión, el abatimiento y la desazón.
El opio produce adicción, tolerancia y dependencia física y psíquica. La intensidad del síndrome de abstinencia, y su gravedad, depende de varios factores: tipo de droga, tiempo de uso, personalidad del consumidor, etcétera. Los primeros síntomas comienzan a parecer ocho horas después de la última dosis con lagrimeo, sudoración, bostezos y sueño agitado. A continuación los síntomas se agudizan gradualmente y aparecen: irritabilidad, insomnio, pérdida del apetito, debilidad y depresión. Le sigue un cuadro gastrointestinal severo con náuseas y vómitos, dolores, cólicos y diarreas, lo cual provoca una deshidratación importante. Le siguen flashes de frío y calor, contracturas musculares y dolores óseos en la espalda, los brazos y las piernas.
Este período intenso dura alrededor de diez días aunque existe un efecto residual más largo que provoca alteraciones en la conducta que inducen a una recaída.
Alucinógenas
Las drogas conocidas como alucinógenos son fármacos que provocan alteraciones psíquicas que afectan a la percepción. La palabra "alucinógeno" hace referencia a una distorsión en la percepción de visiones, audiciones y una generación de sensaciones irreales. La alucinación es un síntoma grave de la psicosis de la mente y su aparición distorsiona el conocimiento y la voluntad.
Los Alucinógenos se consideran productos psicodélicos que inhiben los mecanismos de defensa del yo, y facilitan la distribución de la sensibilidad así como la aparición de imágenes desconcertantes.
LSD (ácido lisérgico)
El LSD es una sustancia semisintética, derivado del ergot, extracto éste del cornezuelo del centeno, usado en medicina al final de la Edad Media. También fue muy utilizado en obstetricia para evitar hemorragias puerperales y promover la contracción del útero. En un principio fue utilizado con fines terapéuticos en alcohólicos, cancerosos y otros enfermos terminales para ayudarles a superar el trance. Posteriormente fue abandonada la práctica al comprobarse los resultados adversos, tales como suicidios a causa de las engañosas imágenes y terroríficas visualizaciones. También se comprobó que podía desencadenar esquizofrenia y deterioros mentales variados.
Descubierto en 1938, se considera al ácido lisérgico como el alucinógeno más poderoso, aunque no el más nocivo. Como fenómenos físicos hay que citar la midriasis, temblores, e hiperreflexia, también pueden aparecer náuseas, palidez, sudoración, taquicardia y lipotimia. Los fenómenos psíquicos se caracterizan en lo referente al estado de ánimo por fluctuaciones del humor, variando entre distintas displacenteras, euforia expansiva tales como verborrea y risa irrefrenable. La exaltación mística es tal que algunos autores denominan esta drogas como místicomiméticos.
A la experiencia con esta droga le llaman "un viaje", el cual puede tener una duración hasta de 12 horas. Pero muchas veces éste resulta ser una pesadilla. Algunos usuarios experimentan pensamientos y visiones aterradoras que crean en ellos tal pánico que muchos han saltado al vacío provocando su propia muerte para huir de estas sensaciones que identifican como un peligro real.
Éxtasis o Mdma
La metilendioximetanfetamina (MDMA), normalmente conocida como "éxtasis", "ectasi" o "X-TC", es una droga sintética sicoactiva con propiedades alucinógenas de gran potencial emotivo y perturbador psicológico, con propiedades similares a las anfetaminas. Su estructura química (3-4 metilendioximetanfetamina) se asemeja a la estructura de la metilendioxianfetamina (MDA) y de la metanfetamina, otros tipos de drogas sintéticas causantes de daños cerebrales. Durante los años sesenta se utilizó con fines terapéuticos dado que según determinados sectores de la psiquiatría ayudaba a la comunicación y al tratamiento de neurosis fóbicas. Surgió entonces la polémica médico - legal, atribuyendo a su consumo repercusiones en la delincuencia, por lo que finalmente fue ilegalizado. El éxtasis produce efectos síquicos de gran potencial perturbador. Inicialmente el sujeto experimenta sensaciones de confianza y excitación, a las que sigue un estado de hiperactividad e incremento en los pensamientos morbosos. Los efectos del estimulante se diluyen provocando trastornos sicólogos, como confusión, problemas con el sueño (pesadillas, insomnio), deseo incontenible de consumir nuevamente drogas, depresión, ansiedad grave y paranoia. Estos efectos han sido reportados incluso luego de varias semanas del consumo. También se han informado casos graves de psicosis. Entre los síntomas físicos pueden citarse: anorexia, tensión y trastornos musculares similares a los presentes en la enfermedad de Parkinson, bruxismo, náuseas, visión borrosa, desmayos, escalofríos y sudoración excesiva (este último signo es característico durante la intoxicación).
El aumento de la frecuencia cardíaca y la tensión arterial, crea riesgos de trastornos circulatorios o cardíacos. Informes forenses indican que en personas con deficiencias cardiorespiratorias puede producir muerte súbita. Esta droga drena el cerebro de una importante substancia química conocida como serotonin, lo cual ocasiona cambios en el estado de ánimo, en las funciones sexuales y la sensibilidad al dolor.
Metanfetamina
La persona que usa "Ice" piensa que la droga le proporciona energía instantánea. La realidad es que la droga acelera el sistema nervioso, haciendo que el cuerpo utilice la energía acumulada. Al no descansar lo suficiente y dejar de alimentarse-por la pérdida del apetito-el "Ice" causa daño permanente a la salud.
Los efectos que causa al cuerpo varían de acuerdo a la cantidad de droga utilizada. Entre los síntomas observados se encuentran los siguientes: lesión nasal cuando la droga es inhalada; sequedad y picor en la piel; acné; irritación o inflamación; aceleración de la respiración y la presión arterial; lesiones del hígado, pulmones y riñones; extenuación cuando se acaban los efectos de la droga (necesidad de dormir por varios días); movimientos bruscos e incontrolados de la cara, cuello, brazos y manos; pérdida del apetito; depresión aguda cuando desaparecen los efectos de la droga.
Mda
La MDA, el fármaco de origen de la MDMA, es una droga similar a la anfetamina que también ha sido objeto de abuso, presentando efectos psico-físicos similares a los de la MDMA. Las investigaciones han mostrado que la MDA destruye las neuronas productoras de serotonina, que regulan directamente la agresión, el estado de ánimo, la actividad sexual, el sueño y la sensibilidad al dolor. Es probable que esta acción sobre el sistema productor de serotonina sea el origen de las propiedades síquicas. La MDMA también guarda relación en su estructura y sus efectos con la metanfetamina, la cual ha demostrado ser causante de la degeneración de las neuronas que contienen la sustancia neurotransmisora dopamina. Recientes descubrimientos hechos mediante varios sistemas de diagnóstico por imágenes indican una relación directa de medios-causa-consecuencia entre MDA y MDMA-dopamina-esquizofrenia.
En experimentos de laboratorio, una sola exposición a la MDA en dosis elevadas o el uso prolongado en dosis bajas destruye hasta un 50% de las células cerebrales. Aunque este daño tal vez no sea aparente de inmediato, con el envejecimiento o la exposición a otros agentes tóxicos pueden aparecer síntomas de la enfermedad de Parkinson con el tiempo. Estos comienzan con falta de coordinación y temblores, y a la larga pueden causar una forma de parálisis.
Cannabis sativa - Hachis - Marihuana
El cannabis sativa es un arbusto silvestre que crece en zonas templadas y tropicales, pudiendo llegar una altura de seis metros, extrayéndose de su resina el hachís. Su componente psicoactivo más relevante es el delta–9-tetrahidrocannabinol (delta-9-THC), conteniendo la planta más de sesenta componentes relacionados. Se consume preferentemente fumada, aunque pueden realizarse infusiones, con efectos distintos. Un cigarrillo de marihuana puede llegar a contener 150 mg. de THC, y llegar hasta el doble si contiene aceite de hachís, lo cual según algunos autores puede llevar al síndrome de abstinencia si se consume entre 10 y 20 días. La tolerancia está acreditada, siendo cruzada cuando se consume conjuntamente con opiáceos y alcohol. Respecto a la dependencia, se considera primordialmente psíquica. Los síntomas característicos de la intoxicación son: ansiedad, irritabilidad, temblores, insomnios, muy similares a los de las benzodiacepinas.
Puede presentarse en distintas modalidades de consumo, sea en hojas que se fuman directamente, en resina del arbusto o en aceite desprendido de éste último. El color de la hoja va del verde amarillento al marrón oscuro según el lugar de procedencia. De la modalidad en que se presente la droga dependerá su denominación: "marihuana" es el nombre de las hojas del cáñamo desmenuzadas, que después de secarse y ser tratadas pueden fumarse (también es conocida como "hierba", "marijuana", mariguana", "mota", "mafú", "pasto", "maría", "monte", "moy", "café", "chocolate", etc.; en inglés se la conoce como: "pot", "herb", "grass", "weed", "Mary Jane", "reefer", "skunk", "boom", "gangster", "kif", "ganja", etc.); su efecto es aproximadamente cinco veces menor que el del hachís. El nombre hachís (también conocido como "hashis") deriva de los terribles asesinos (hashiscins) árabes, que combatieran en las cruzadas entre los años 1090 y 1256. El hachís se obtiene de la inflorescencia del cáñamo hembra, sustancia resinosa que se presenta en forma de láminas compactas con un característico olor. La marihuana es la forma más frecuente, conteniendo de 0,3 a 3 % de delta THC; la concentración de THC llega al 10 % en el hachís, siendo su efecto diverso según factores como la velocidad con la que se fuma, la duración de la inhalación, cantidad inhalada, tiempo que el consumidor retiene la respiración después de inhalar y el estado anímico del sujeto. El consumo oral, tanto de marihuana como de hachís, implica efectos psicológicos similares a los expresados en la forma fumada pero de mayor intensidad y duración y con efectos nocivos potenciados.
La constancia escrita más antigua sobre su consumo data de la época del Emperador chino SHEN NUNG en el 1237 a.C. También fue conocido por los asirios y griegos del siglo V a.C. En la India hay constancia de su utilización desde hace más de 2.000 años, con finalidad de tipo místico en muchas ocasiones. Hay descripciones en el Antiguo Testamento sobre la sustancia, aunque de forma vaga y no comprobada. Hay casi absoluta certeza de su consumo por los griegos según unánimes referencias doctrinales, así como por los romanos, siendo los árabes los que la comercializaron en su área de influencia. Posiblemente las tropas de Napoleón la extendieron por Europa, en el siglo XIX. Los árabes utilizaron la droga como calmante de enfermedades mentales. Terapéuticamente se aconsejó para tratamientos de insomnio y como sedante para el dolor. También se prescribió para terapias de patologías nerviosas, así como para el tratamiento de la tos, temblores en parálisis compulsivas, espasmos de vejiga e impotencia sexual que no provenga de enfermedad orgánica. Así mismo se recomendó como afrodisiaco, antineurálgico, tranquilizante para maníaco-depresivo, antihistérico, tónico cerebral, remedio para el vómito nervioso, epilepsia y enfermedades nerviosas. Estas recomendaciones fueron posteriormente desaconsejadas unánimemente por la medicina, estando en la actualidad en estudio sólo la legalización de un fármaco derivado de esta sustancia para mitigar los dolores en enfermos cancerosos. Este empleo terapéutico ha creado profundas polémicas. En la actualidad, existe acuerdo científico en que la marihuana no puede considerarse medicamento en ninguna de las formas en que es consumida por los adictos. Al tratar su posible uso como medicamento, se distingue entre la marihuana y el THC puro y otros químicos específicos derivados del cánnabis. La marihuana pura contiene cientos de químicos, algunos de ellos sumamente dañinos a la salud. El THC en forma de píldora para consumo oral (no se fuma) podría utilizarse en el tratamiento de los efectos colaterales (nauseas y el vómito) en algunos tratamientos contra el cáncer. Otro químico relacionado con el THC (nabilone) ha sido autorizado por la "Food and Drug Administration" de Estados Unidos para el tratamiento de los enfermos de cáncer que sufren náuseas. En su forma oral, el THC también se usa en enfermos de SIDA, porque les ayuda a comer mejor y mantener su peso. Los científicos estudian la posibilidad de que el THC y otros químicos relacionados con la marihuana tengan ciertos valores medicinales. Algunos piensan que estos químicos se podrían usar en el tratamiento del dolor severo, pero es necesario tener más evidencia antes de usarlos para el tratamiento de problemas médicos.
Durante los años sesenta comienza el consumo casi masivo de esta sustancia así como de otras alucinógenas como el LSD, peyote, etc. En el mundo de la música y luego entre la burguesía intelectual norteamericana cundió la moda de fumar marihuana y hachís, extendiéndose a Europa Occidental. El cánnabis fue un signo más del movimiento contracultural pretendiendo una nueva ideología, dentro de la burguesía, basada en el pacifismo, el orientalismo, el amor libre y la vida en la naturaleza. Al principio el consumo afectó a estudiantes y clases altas y medias, para después extenderse por todos los estratos sociales, consumiéndose junto con alcohol y comenzando a crear problemas sanitarios. A pesar de ser una sustancia ilegal, su consumo continúa en aumento. Está probada la relación entre el consumo de esta droga y otras como alcohol, LSD, cocaína, anfetaminas y opiáceos, habiéndose probado su función en la escalada a drogas más peligrosas.
Las modalidades de marihuana disponibles a los jóvenes son más potentes que las que existían en la década del '60. Ello se debe a que los laboratorios clandestinos de los traficantes han conseguido realizar cambios a nivel genético en el cánnabis mediante sofisticados métodos de biotecnología, resultando en una mayor concentración de THC. La potencia de la droga se mide de acuerdo a la cantidad promedio de THC que se encuentra en las muestras de marihuana que confiscan las agencias policíacas.
La marihuana común contiene un promedio de 3 % de THC, pudiendo alcanzar el 5,5 %. La resina tiene desde 7.5 %, llegando hasta 24 %. El hachís (resina gomosa de las flores de las plantas hembras) tiene un promedio de 3.6 %, pero puede llegar a tener hasta 28 %. El aceite de hachís, un líquido resinoso y espeso que se destila del hachís, tiene un promedio de 16 % de THC, pero puede llegar a tener hasta 43 %.
El THC afecta a las células del cerebro encargadas de la memoria. Eso hace que la persona tenga dificultad en recordar eventos recientes (como lo que sucedió hace algunos minutos), y hace difícil que pueda aprender mientras se encuentra bajo la influencia de la droga. Para que una persona pueda aprender y desempeñar tareas que requieren de más de dos pasos, es necesario que tenga una capacidad normal de memoria a corto plazo. Estudios recientes demuestran que la marihuana crea disfunciones mentales y disminución de la capacidad intelectual en las personas que la fuman mucho y por muchos años. En un grupo de fumadores crónicos en Costa Rica, se encontró que los sujetos tenían mucha dificultad en recordar una corta lista de palabras (que es una prueba básica de memoria). Las personas en el estudio también tuvieron gran dificultad en prestar atención a las pruebas que se les presentaron.
Es posible que la marihuana destruya las células de ciertas regiones especializadas del cerebro. Los científicos han observado que cuando se dieron altas dosis de THC a las ratas de laboratorio, presentaron pérdida de células cerebrales similares a las que se encuentran entre los animales ancianos. Los cerebros de ratas de entre 11 y 12 meses de edad (aproximadamente la mitad de sus vidas) tenían las características los de animales ya viejos.
Existen serias preocupaciones por sus efectos a largo plazo sobre la salud. Por ejemplo, un grupo de científicos de California examinó el estado de salud de 450 fumadores cotidianos (diarios) de marihuana (que no fumaban tabaco). En comparación con otras personas no fumadoras, estas personas tenían más ausencias de trabajo por enfermedad y más visitas médicas por problemas respiratorios y otras enfermedades. Los resultados indican que el uso regular de la marihuana o del THC son factores que provocan cáncer y problemas en los sistemas respiratorio, inmunológico y reproductivo.
Tradicionalmente usados para combatir la fatiga, el hambre y el desánimo, los estimulantes provocan una mayor resistencia física transitoria gracias a la activación directa del sistema nervioso central.
Estimulantes vegetales
El café, el té, el mate, la cola, el cacao, el betel y la coca son plantas que crecen en muchas partes del mundo. A pesar de que algunas de estas plantas suelen consumirse repetidas veces al día durante buena parte de la vida, son sustancias tóxicas que poseen efectos secundarios.
Los efectos de la intoxicación crónica se pueden observar en los catadores de té. Tanto los catadores británicos como los hindúes padecen cirrosis, agitación, angustia, temblores, insomnio, náuseas y vómito.
El cacao era consumido por los aztecas debido a su contenido de cafeína y de teobromina. Sin embargo, los chocolates actuales no suelen contener estos alcaloides.
El consumo abusivo de café puede causar hipertensión y gastritis, sin contar con que también contiene alquitranes cancerígenos.
Aunque los estimulantes vegetales son considerados inocuos, conviene moderar su consumo ya que se trata de sustancias tóxicas susceptibles de producir efectos secundarios nocivos.
Coca
La coca, hoja del arbusto indígena americano «Erythroxylon coca», pertenece al grupo de los estimulantes. Su consumo es ancestral en ciertas partes de Latinoamérica, donde es una práctica habitual mascar las hojas, siendo una gran mayoría de los consumidores de las zonas donde se cultiva. Su efecto sobre el sistema nervioso central es menor que los de la cocaína, dado que para extraer un gramo de esta sustancia se necesitan 160 hojas de coca. La coca es consumida mascándola con algún polvo alcalino como cenizas de vegetales o cal. También es fumada tanto sola como mezclada con tabaco y marihuana. La masticación de coca fue objeto de estudio por determinados facultativos, como CHOPRA (1958), comprobando síntomas de abstinencia, depresión, fatiga, toxicidad y alucinaciones, seguidos por NEGRETE (1967), BRUCK (1968) quienes recogían lesiones cerebrales también en masticadores que la consumían frecuentemente.
Estimulantes químicos
La cocaína
En los casos de intoxicación aguda, sus efectos, que consisten en la hiperestimulación, el aumento de la presión sanguínea y la aceleración del ritmo cardíaco, seguidos de una subestimulación, con parálisis muscular y dificultades respiratorias, puede terminar en un colapso cardiocirculatorio.
La pasta base de la coca mezclada con bicarbonato sódico es conocida con el nombre de crack, que es mucho más tóxico que el clorhidrato de cocaína. Aunque no se dispone todavía de estudios sobre su uso, efectos secundarios y contraindicaciones, se sabe que existen numerosas víctimas mortales por sobredosis de esta sustancia.
La cocaína es un alcaloide contenido en las hojas del arbusto «Erythroxylon coca» siendo químicamente un derivado de la latropina. Es un estimulante cerebral extremadamente potente, de efectos similares a las anfetaminas. Además, es un enérgico vasoconstrictor y anestésico local, siendo absorbido por las mucosas nasales cuando se la aspira, se metaboliza en el hígado y se elimina por la orina. Fue usada inicialmente para el tratamiento de trastornos respiratorios y depresivos. Por su efecto analgésico, se usó en intervenciones quirúrgicas. Posteriormente se empleó con fines militares por su efecto vigorizante y el componente de agresividad que otorga. A comienzos del Siglo XX comienza a consumirse por aspiración nasal. En esta época, eran prácticamente desconocidos sus efectos perjudiciales por lo que estaba presente en las fórmulas de bebidas, jarabe contra la tos, lociones capilares, y hasta cigarrillos. En 1909 existían en EE.UU. más de 70 bebidas registradas con componentes de cocaína, lo que incrementó la producción en los países donde se cultivaba coca, fundamentalmente Perú. Los estudios del uso de cocaína comenzaron, con FREUD, al que siguieron HEMMOND (1887) y BOSE (1902), los cuales encontraron sintomatología aguda y crónica en el consumo. Recientemente, en la década de 1980, los experimentos sobre patrones de consumo y cantidades certificaron sus efectos sobre la adrenalina, muy relacionada con la agresividad. En las dos últimas décadas hubo un enorme incremento en la cantidad de personas adictas a la cocaína, resaltándose como dato significativo la adicción simultánea a otras sustancias. Las consecuencias de su consumo son complejas, involucrando daños de muy diversa índole: cerebrales, sociales, familiares, medioambientales, etc.
La cocaína estimula el sistema nervioso central, actuando directamente sobre el cerebro. Sus efectos fisiológicos inmediatos son: sudoración, aumento en la potencia muscular, midriasis, incremento de actividad cardíaca y presión sanguínea, dilatación de los vasos sanguíneos periféricos, convulsiones, aumento en el ritmo respiratorio y de la temperatura corporal. Estos síntomas pueden provocar la muerte por paro cardíaco o fallas respiratorias. Además se presentan irritaciones y úlceras en la mucosa nasal. Comúnmente causa congestión nasal, que puede presentarse o no con secreción liquida. El uso por vía inyectable expone al adicto a infecciones de SIDA, hepatitis B y C, y otras enfermedades infectocontagiosas. La infección con el HIV puede producirse por la transmisión directa de virus al compartir agujas y otros dispositivos contaminados. Además, puede producirse indirectamente por transmisión prenatal a un niño cuya madre está infectada con el HIV. El uso y abuso de drogas ilícitas, incluyendo el crack y la cocaína, se han convertido en el principal factor de riesgo de contagio con el virus HIV. Sumado a ello, la hepatitis C se está difundiendo rápidamente entre los adictos que se inyectan; el índice de infección varía entre el 65 y el 90 por ciento en este grupo de personas, de acuerdo al país. Hasta hoy, no se ha descubierto una vacuna contra el virus de la hepatitis C, y el único tratamiento disponible es caro, muchas veces infructuoso, y con serios efectos colaterales.
La cocaína es una droga extremadamente adictiva, cuyos efectos se perciben en un lapso de 10 segundos y duran alrededor de 20 minutos. Actúa directamente sobre los centros cerebrales encargados de las sensaciones del placer. Dada su alta capacidad de producir daños y hasta destrucción celular, las sensaciones que eran placenteras en sujetos recién iniciados se convierten en efectos desagradables como agitación, llanto, irritabilidad, alucinaciones visuales auditivas y táctiles, delirio paranoide, amnesia, confusión, fobias o terror desmedido, ansiedad, estupor, depresión grave y tendencias suicidas. Los efectos psíquicos reconocidos por la mayoría de los autores y recogidos en publicaciones recientes incluyen euforia, inestabilidad, aumento de la comunicación verbal y de la seguridad en uno mismo, inquietud, anorexia, insomnio e hipomanía. El adicto experimenta pérdida de interés e imposibilidad de sentir placer ante la falta de la sustancia. Así, la cocaína se convierte en el único objetivo y motivo en la vida del adicto, desplazando todo tipo de sentimientos. La relación con los fenómenos criminales son expresamente citados por los autores, asociándose su consumo a la predisposición al delito.
La cocaína es consumida por muy variados tipos de sujetos y motivos. Existe un patrón de consumo recreativo, al estilo del alcohol, presentando una ingesta controlada de la sustancia: es el caso de quienes ingieren la droga ocasionalmente cuando se les ofrece. Se diferencian radicalmente de adictos habituales, quienes desarrollan tolerancia y necesitan de mayores dosis para alcanzar iguales resultados. A esta situación puede llegarse por causas diversas pero siempre relacionadas con factores sociales y ambientales determinantes. La adicción a la cocaína posee condicionantes que la desencadenan, que pueden ser el reforzamiento de una personalidad insegura, que recibe un apoyo en el estímulo del tóxico. En lugar de tratar este déficit patológico con antidepresivos o fármacos estabilizadores del estado de ánimo se recurre a una vía aparentemente rápida. Dado que los efectos de la cocaína sobrepasan su punto álgido a los treinta minutos, el individuo precisa varias dosis durante el día para alcanzar cierta estabilidad emocional y evitar el efecto disfórico que la propia droga ocasiona luego de varias horas desde la ingesta.
Cocaína y desarrollo embrio-fetal
El uso de cocaína es altamente susceptible de producir daños irreparables en recién nacidos, cuyas madres mantuvieron su adicción durante el embarazo. Esto último hizo que algunos Estados de los Estados Unidos de América obliguen a las adictas embarazadas a realizarse tratamientos forzosos con privación de libertad mientras dura el embarazo. Aún se desconoce la total extensión de los efectos de la exposición prenatal a la cocaína, pero los estudios científicos indican que estos bebés nacen prematuramente e insuficientemente desarrollados: con menor peso, diámetro craneal inferior y menor longitud. La determinación exacta de las consecuencias para el recién nacido es compleja, y varía de acuerdo a la droga que fue consumida por la madre. Sumado a ello, se sabe estadísticamente que las madres adictas a la cocaína abusan de otra u otras sustancias. El cuadro se complica al considerar la cantidad y variedad de drogas consumidas, la falta de cuidados prenatales, el status socioeconómico, la exposición a enfermedades infectocontagiosas, otros problemas de salud, pobre alimentación, y muchos otros factores que intervienen directamente sobre la salud del feto y el recién nacido. Se ha descubierto que la exposición a la cocaína durante el desarrollo fetal puede provocar retrasos y otras deficiencias mentales, como así también imposibilidad de mantener la atención y la concentración por períodos de tiempo mínimos como para permitir el aprendizaje. A pesar de la gravedad de las lesiones y trastornos sufridos por estos niños, las modernas técnicas de tratamiento permiten una recuperación significativa. De cualquier forma, es un hecho que estos datos y avances son sólo paliativos, y no pueden tomarse como 100% eficaces.
La cocaína estimula el sistema nervioso central. Sus efectos inmediatos incluyen:
  • dilatación de las pupilas
  • aumento de la presión sanguínea,
  • del ritmo cardiaco y respiratorio
  • aumento en la temperatura del cuerpo
  • Su uso ocasional puede producir...
  • congestión o drenaje de la nariz
  • ulceración de la membrana mucosa de la nariz
  • La inyección de cocaína con equipo contaminado puede producir SIDA, hepatitis y otras enfermedades.
El uso crónico de esta droga causa los siguientes síntomas en el organismo en adición a los efectos arriba mencionados:
  • dolor abdominal
  • nauseas
  • vómitos
  • respiración irregular
  • convulsiones
  • paro cardiaco
La mezcla de cocaína con heroína, conocida como "speedball", puede causar la muerte.
La cocaína es una de las drogas más adictivas que hay, ya que su efecto, aunque fuerte, es de corta duración. El Crack es extremadamente adictivo.
Crack
También denominado "cocaína del pobre", acarrea un grave riesgo social y sanitario, por la dependencia que provoca y los efectos nocivos que ocasiona en el organismo. Se obtiene de la maceración de hojas de coca con kerosene y compuestos sulfurados, que lavada posteriormente con ciertos elementos volátiles, se convierte en el clorhidrato de cocaína. La denominada base es un tóxico de mayor potencial nocivo que la cocaína, posee impurezas que impiden su administración endovenosa. Se ingiere por inhalación, lo que conlleva lesiones en la mucosa nasal y en el aparato digestivo. También se consume fumada en cigarrillos o pipas diseñadas al efecto.
La intoxicación por esta sustancia implica cuadros delirantes seguidos de procesos depresivos intensos. Sus consecuencias nocivas sobre el organismo son equiparables a las de las anfetaminas administradas por vía endovenosa, desestructurando la personalidad, y colocándola en una adicción compulsiva. Las lesiones orgánicas son evidentes e irreversibles. Usualmente, los adictos crónicos o aquellos que llevan varios meses con ingestas de relevante cantidad y de forma continuada, sufren patologías mentales graves y crónicas como demencia o paranoia. Las lesiones en el cerebro son irreversibles.
Las anfetaminas
Fueron sintetizadas por primera vez entre la última década del siglo XIX y la primera del siglo XX. Los primeros experimentos clínicos se iniciaron hacia 1930, y desde 1935 se comercializó con gran difusión en el Reino Unido, Francia y Alemania. Durante la Segunda Guerra Mundial fue utilizada indiscriminadamente por todos los bandos, dado el carácter euforizante que contiene la sustancia y la agresividad otorga.
Las anfetaminas fueron utilizadas como estimulantes, luego en forma de inhalaciones para el tratamiento de catarros y congestiones nasales, más tarde como píldoras contra el mareo y para disminuir el apetito en el tratamiento de la obesidad y, finalmente, como antidepresivos.
Presentan una elevada tolerancia, que produce habituación y necesidad de dosis progresivamente más elevadas.
El consumo de este excitante está ampliamente extendido y distribuido por todas las clase sociales. A diferencia de lo que sucede con la cocaína que la consumen preferentemente los sectores medios y altos, las anfetaminas son consumidas tanto por ejecutivos que pretenden sobreexcitación como por amas de casa que buscan un anoréxico para sus dietas o por estudiantes que preparan exámenes. Al incidir en el sistema ortosimpático causan hipertensión, taquicardia, hiperglucemia, midriasis, vasodilatación periférica, hiperpnea, hiporexia, etc. El estado de ánimo del adicto oscila entre la distrofia y la hipomanía, así como ansiedad, insomnio, cefalea, temblores y vértigo. Pueden aparecer cuadros depresivos y síndromes paranoides anfetamínicos. A dosis normales, sus efectos varían de acuerdo al individuo y las condiciones de ingesta. Pueden producir efectos placenteros, hiperactividad y sensación desbordante de energía, pero también causan temblor, ansiedad irritabilidad, ira inmotivada y repentina y trastornos amnésicos e incoherentes. En la última fase se describen depresión, cuadros paranoides y delirios paranoides, alucinaciones y trastornos de conducta. El consumo de anfetaminas puede conducir a actuaciones agresivas, al igual que los barbitúricos y el alcohol, por su gran efecto euforizante, unido a un descontrol en los instintos inhibitorios. Tales situaciones se producen cuando las dosis suministradas, generalmente por vía endovenosa, superan los 2 gr. Está demostrado un mayor potencial en las anfetaminas que en la cocaína, tanto en su punto más álgido como en la duración de los efectos. Reacciones muy graves se producen al consumirlas con barbitúricos en el conocido fenómeno de la pluritoxicomanía. Tomadas en dosis importantes son causantes de confusión, tensión, ansiedad aguda y miedo. También pueden precipitar psicosis paranoide en sujetos no psicóticos. La psicosis anfetamínica desarrollada por el sujeto se asemeja a la psicosis paranoica y a la esquizofrenia paranoica.
El consumo de anfetaminas produce en el cuerpo los siguientes síntomas:
  • acelera el ritmo cardiaco y pulmonar
  • dilata las pupilas
  • reduce el apetito
  • produce sequedad en la boca
  • sudores
  • dolores de cabeza
  • pérdida de visión
  • mareos
  • insomnio
  • ansiedad
  • A largo plazo y/o usadas en dosis elevadas, ocasionan:
  • temblores
  • pérdida de coordinación
  • colapso físico
  • daño a riñones y tejidos
  • depresión
  • malnutrición
  • aumento repentino de presión sanguínea que puede producir la muerte por ataque, fiebre muy alta o insuficiencia cardiaca.
Es adictiva porque el organismo la asimila y crea tolerancia a la droga, lo que ocasiona que el usuario necesite cada vez mayor cantidad para lograr la misma nota estimulante.
Café, té, colas
Son estimulantes del Sistema Nervioso Central , cuya sustancia activa es la cafeína. Los efectos buscados por el consumidor es el aumento de la agudeza mental. Sus efectos a largo plazo pueden ser el agravamiento de problemas orgánicos. No son adictivas físicamente, pero sí psicológicamente.
El consumo de drogas, legales e ilegales, constituye un problema de salud pública muy importante. Los riesgos y daños asociados al consumo varían para cada sustancia.
Además, es necesario tener en cuenta las variables personales como el grado de conocimiento o experiencia del usuario, su motivación, etc. y las propiedades específicas de cada droga así como la influencia de los elementos adulterantes.
Estas consecuencias son muy diversas y pueden subdividirse en:
Sociales
Los adictos a drogas, con frecuencia se ven envueltos en agresiones, desorden público, conflictos raciales, marginación,...
Cuando se comienza a necesitar más a las drogas que a las otras personas pueden arruinarse o destruirse las relaciones íntimas y perderse las amistades. Se puede dejar de participar en el mundo, abandonar metas y planes, dejar de crecer como persona, no intentar resolver constructivamente los problemas y recurrir a más drogas como "solución".
El abuso de las drogas puede también perjudicar a otros, por ejemplo: el dinero con que son pagadas las drogas puede privar a la familia de satisfacciones vitales como comida o ropa. El discutir los problemas y situaciones de la adicción puede generar conflictos familiares. Las reacciones violentas a las drogas pueden llevar al usuario a cometer asaltos e incluso asesinatos. Si una mujer embarazada toma drogas sin control médico puede ocasionar malformaciones genéticas en el nuevo ser que está en gestión.
Legales
Abusar de las drogas es contra la ley. Los ofensores (tanto los que experimentan como los que se dedican al consumo de drogas) corren el riesgo de tener que pagar multas y/o ser encarcelados. Un arresto puede significar vergüenza, interrupción de los planes de vida, antecedentes penales. Ciertas drogas pueden desencadenar una violencia incontrolable y conducir al usuario a crímenes que son severamente punibles por la ley.
Económicas
Dado el ingente volumen de dinero que mueve el mercado de las drogas y el narcotráfico, tanto los consumidores como los países contraen importantes deudas; se crean bandas organizadas; se produce desestabilización económica nacional, etc. El uso continuo de drogas puede ser muy caro, ya que sus costos se elevan a cientos y, en ocasiones, a miles de dólares por año. Para sostener su hábito muchos usuarios recurren al crimen.
Prevención del abuso de drogas
La prevención del abuso de drogas significa tomar una actitud positiva para oponerse al abuso de drogas, de modo que nunca se convertirá en un problema. Para eso se requiere:
  • Entender el por qué del abuso de las drogas.
  • Animar el desarrollo de las cualidades individuales que llevan a la satisfacción personal.
  • Identificar las condiciones bajo las cuales haya más probabilidad de que comience el abuso de drogas.
  • Apoyar el esfuerzo continuo de comunicación entre padres, niños del mismo grupo, la comunidad y las escuelas.
  • Crear alternativas que ayuden a satisfacer las necesidades de las personas.
  • Comprometerse a ayudar permanentemente porque no basta asistir a una conferencia de vez en cuando.
  • Para ayudar a prevenir el abuso de las drogas hay que animar el desarrollo de las cualidades positivas, esto es: ayudar a gente joven a desarrollar actitudes, valores y comportamiento que conduzcan a la fortaleza interna, la satisfacción y el alcance de metas. Entre las cualidades importantes se encuentran:
  • El amor propio, los que se estiman a si mismos y creen en sus propias habilidades tienen menos riesgo de abusar de las drogas.
  • El asistir a la escuela con confianza, el frecuentar cursos pueden ser una experiencia placentera para los que se desempeñan bien. Hay que animar a los estudiantes a que desarrollen hábitos de estudio que lleven al éxito en las aulas y a tener confianza en ellos mismos.
  • Responsabilidad, los que acostumbran a tomar decisiones desarrollan un mayor sentido de responsabilidad y aprender a tomar decisiones prudentes acerca de muchas cosas, incluyendo el abusar de las drogas.
  • Ambición, los que quieren alcanzar el éxito con frecuencia rechazan las drogas porque se dan cuenta que ellas pueden interponerse a sus metas.
  • El bastarse a uno mismo, cuando las personas aprenden a entretenerse ellas solas y a satisfacer su propia curiosidad, quedan mejor preparadas para actuar independientemente.
  • Simpatía, la sociabilidad puede ayudar a las personas a hacer amistades y a mantenerlas. Los que experimentan la aprobación social corren menos riesgo de abusar de las drogas para ganarse la aprobación de sus iguales.
  • Optimismo, las personas alegres, que se interesan en la vida y que esperan las cosas buenas que la vida trae, pueden corren menos riesgo de abusar de las drogas.
  • Asiduidad, el establecer metas razonables y el esforzarse por alcanzarlas puede dar satisfacción personal y evitar el aburrimiento.
Educar es prevenir
No hay una fórmula mágica para derrotar el auge de las drogas en nuestro país y en el mundo. La prevención es la medida más efectiva que podemos tomar como padres y representantes responsables. Esta prevención exige un trabajo duro y constante que permita desarrollar en nuestros hijos y representados sus capacidades y destrezas para defenderse de las drogas. Para lograrlo, debemos seguir pasos muy concretos.
  • Sembrar en nuestra familia los valores de responsabilidad, disciplina, solidaridad y compromiso social.
  • Respetar al joven y al niño como individuos capaces de opinar, decidir y participar en la vida familiar y escolar.
  • Orientar al joven y al niño sobre el uso de su tiempo libre.
  • Educar al joven y al niño para que se estimen y se respeten a sí mismos.
  • Enseñar con el ejemplo propio.
  • Conversar frecuentemente con niños y jóvenes sobre este tema.
  • Hablar sobre los mensajes que transmiten los medios de comunicación.
  • Compartir actividades para estrechar los lazos familiares.
  • Relacionarse con los amigos de los hijos para conocer sus intereses y los lugares que frecuentan.
  • Comunicarse con los hijos, alumnos y jóvenes para discutir las dificultades que puedan surgir en su entorno.
  • Asumir posiciones claras y firmes al hablar de las drogas.
La responsabilidad en el núcleo familiar
Muchos padres responsabilizan a "las malas compañías" de conducir a sus hijos por el camino, pero la realidad es que a veces, la familia, sin darse cuenta, puede propiciar en el niño o el joven, el uso de drogas por varias razones:
  • Ausencia física de los padres u otros miembros de la familia.
  • Falta de apoyo emocional.
  • No establecer normas y límites.
  • No construir auténticas relaciones de afecto y limitarse a dar alimento, objetos y dinero.
  • Sobreproteger a los hijos, ignorar sus capacidades y no permitir su independencia.
  • Exceso de autoridad, que se manifiesta en frecuentes maltratos y castigos.
  • Permanente clima de discusión, tensión e incomunicación.
  • Despreocupación total por satisfacer las necesidades básicas de alimento, vestido, educación, recreación y afecto, creyendo que cuanto más trabajo pasen nuestros hijos, más aprenderán.
  • Poseer antecedentes familiares de consumo de drogas.
  • Predicar conductas que no se practican.
Ayuda al adicto
Dejar el hábito de la droga sin ayuda externa puede resultar peligroso (debido a los síntomas de abandono) y difícil (debido a la necesidad psicológica).
Puede obtenerse ayuda y/o información a través de muchas agencias, dependencias y personas privadas y públicas. Por ejemplo:
  • Centros y clínicas de tratamiento de drogadicción, que se especializan en tratar a personas con problemas de drogas.
  • Hospitales que tratan a pacientes internados o externos.
  • Centros de salud mental y de orientación, que pueden tratar a personas con problemas de drogas analizando los problemas subyacentes.
  • Agencias de salud pública y de servicio social, pueden proporcionar consejos prácticos, derivar profesionales, etc.
  • Residencias intermedias, que brindan tratamientos en residencias para personas con problemas de Drogas.
  • Centros de desintoxicación, que se ocupan específicamente de los problemas de alcoholismo y otros relacionados a éste.
Todos los anteriores nos ofrecen diversos programas de tratamientos. Cada persona, de acuerdo a su caso, puede recibir uno o más clases de tratamiento, incluyendo:
  • Supervisión médica, para ayudar con los síntomas de abandono de la droga (como vómito, temblores, calambres, depresión severa, etc.)
  • Mantenimiento de la metadona, para los adictos a la heroína. Ésta bloquea la necesidad física de la heroína y deja que la persona vuelva a tener un estilo de vida más normal.
  • Orientación, psicoterápia, grupos de encuentro, etc. brindan un apoyo moral y contribuyen a tratar las causas de abuso de drogas.
  • Rehabilitación, incluyendo orientación vocacional puede ayudar a la persona a retomar una vida comunitaria más productiva.
  • Empleo de drogas, para eliminar los efectos de los narcóticos.
  • Comunidades terapéuticas, ayudan las personas que abusan de las drogas a mantenerse alejados de ellas y superar los problemas.
Tratamientos para adictos
En los programas de tratamiento se utilizan varios métodos para ayudar al paciente a encarar las ansias por la droga y, tal vez, a evitar una recaída. La investigación muestran que la adicción es tratable. El tratamiento que se ajusta a las necesidades individuales permite al paciente aprender a controlar su condición y vivir una vida relativamente normal.
El tratamiento puede tener un efecto profundo no solo sobre las personas que abusan de las drogas, sino también sobre toda la sociedad, al mejorar significativamente el funcionamiento social y sicológico, disminuir la delincuencia y la violencia relacionadas con las drogas. También puede aminorar espectacularmente los costos del abuso de droga para la sociedad.
Las fases básicas del tratamiento
El tratamiento se puede resumir en términos de un proceso dinámico secuencial o como un programa sistemático de tres fases relacionadas: .
Aceptar la impotencia de las drogas.
La primera meta del tratamiento, una vez pasada la desintoxicación y el proceso de evaluación diagnóstica, es ayudar al paciente a admitir y aceptar que es impotente ante las drogas que alteran el estado de ánimo. En esta fase se le ayuda a aceptar el hecho que su vida se ha vuelto incontrolable (ingobernable) a causa de la adicción.
Reconocer la necesidad de cambio
La segunda meta del tratamiento es ayudar al paciente a reconocer que es crucial para su sobrevivencia cambiar su conducta. En este momento crítico, el equipo profesional necesita transmitir al paciente la convicción de que el tiene la capacidad para hacer cambios. Otro aspecto importante es ayudar al paciente a ver y entender que la estructura del programa, la rutina básica para llevarlo a cabo, es el vehículo para posteriormente lograr los cambios. El período de internamiento es de tratamiento, la recuperación se logrará después, poniendo en práctica lo que se aprendió en el programa. Se introduce al paciente al grupo de autoayuda (Narcóticos Anónimos [NA]) como una herramienta esencial para poder realizar el trabajo de su recuperación.
Planear para actuar
La tercera meta del tratamiento es ayudar al paciente a actuar, tomar decisiones y cambiar las conductas que necesitan ser cambiadas. La meta es apoyar al paciente a empezar a visualizar que podrá y necesitará realizar cambios en su estilo de vida.
Tráfico de drogas
Delito consistente en facilitar o promocionar el consumo ilícito ajeno de determinadas sustancias estupefacientes y adictivas que atentan contra la salud pública con fines lucrativos, aunque esta definición puede variar según las distintas legislaciones penales de cada Estado.
Con el nombre de droga se designa en sentido genérico a toda sustancia mineral, vegetal o animal que se utiliza en la industria o en la medicina y que posee efectos estimulantes, depresores o narcóticos o, como establece la Organización Mundial de la Salud (OMS), a cualquier sustancia que, introducida en un organismo vivo, puede modificar una o varias de sus funciones. A efectos penales, el concepto de droga (a pesar de las diferentes formas de actuación en el organismo) engloba también las sustancias estupefacientes y psicotrópicas, naturales o sintéticas, cuyo consumo reiterado provoca la dependencia física u orgánica, así como el deseo irrefrenable de seguir consumiéndolas en mayores dosis a fin de evitar el síndrome de abstinencia.
Por tráfico de drogas se entiende no sólo cualquier acto aislado de transmisión del producto estupefaciente, sino también el transporte e incluso toda tenencia que, aun no implicando transmisión, suponga una cantidad que exceda de forma considerable las necesidades del propio consumo, ya que entonces se entiende que la tenencia tiene como finalidad promover, favorecer o facilitar el consumo ilícito (entendiéndose como ilícito todo consumo ajeno). En algunas legislaciones se considera delito solamente el tráfico, pero no la tenencia de drogas en cantidades reducidas a las necesidades personales del consumidor, mientras que otras tipifican como conductas delictivas tanto el tráfico como la tenencia. Unas y otras legislaciones han de integrarse en los convenios internacionales y, en concreto, en la Convención de las Naciones Unidas sobre el tráfico ilícito de estupefacientes y sustancias psicotrópicas, suscrito el 20 de diciembre de 1988 en Viena.
Venezuela no es un país productor de drogas, pero su condición socioeconómica y su situación geográfica, lo hacen un territorio clave en el actual mercado latinoamericano de las drogas.
Legitimación de Capitales
Es el proceso mediante el cual las organizaciones criminales logran darle apariencia de legalidad a todos aquellos capitales y bienes provenientes de la actividad ilícita, logrando a través de dicho proceso el ocultamiento del origen ilícito de los referidos capitales y bienes.
Las drogas son agentes naturales o químicos que afectan las funciones y la estructura del cuerpo de los seres vivientes. Cambian la manera de actuar, pensar o sentir de quienes las consumen. Los tipos más comúnmente utilizados son:
La drogadicción es en realidad un fenómeno muy antiguo que en nuestros días se ha manifestado intensa y masivamente. Se observa en todas las edades y en todos lo grupos socioeconómicos; pero, según hemos visto el abuso de los fármacos perjudica enormemente la economía y la salud de los adictos, orillándolos a cometer delitos por la necesidad de obtener la sustancia a la que es adicto, ya sea robando o vendiendo la droga o induciendo a otros que no la han probado.